El café se cultiva en una hectárea de tierra bajo árboles nativos, con el fin de mantener vigente la tradición que se tiene de él en la histórica Hacienda de Tena. En forma didáctica se prepara esta bebida con los visitantes y se recupera la historia de la rubiácea dentro de la casa que lleva el nombre del mesuno Alfredo Cortázar Toledo (1890 – 1983), quien fuera el primer gerente de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia.